Leer todo sobre Cumplimiento y Prevención de Lavado de Dinero, abogados, empresarios y funcionarios públicos en el mercado financiero tradicional y fintech.
De acuerdo con estimaciones de Complif, una compañía que ha digitalizado sus procesos de compliance obtiene una eficiencia 80% superior en comparación con aquellas que no han implementado soluciones tecnológicas óptimas en lo que a este tema respecta.
En el mundo de la gestión de cumplimiento (compliance), otro término importante que se escucha con frecuencia es AML, por sus siglas en inglés, "Anti-Money Laundering", que en español se traduce como "Prevención de lavado de dinero" (PLD). Pero, ¿qué significa realmente AML? ¿Por qué es tan crucial para las empresas y el sistema financiero en general? Y lo más importante, ¿cómo contribuye a prevenir actividades financieras ilícitas? El AML, o combate al lavado de dinero, es un conjunto de medidas y regulaciones diseñadas para prevenir y detectar actividades relacionadas con el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. El lavado de dinero es el proceso mediante el cual los individuos o entidades intentan ocultar el origen ilícito de fondos obtenidos a través de actividades criminales, como el tráfico de drogas, la corrupción o el fraude.
Realizar una evaluación de riesgos de cumplimiento representa la primera y una de las tareas más cruciales asignadas a un oficial de cumplimiento. Dada la propagación de regulaciones a nivel global, las organizaciones enfrentan una creciente presión para cumplir con las normativas de los organismos reguladores y satisfacer las expectativas de clientes y otras partes interesadas.
Las finanzas descentralizadas son una infraestructura en crecimiento que no depende de intermediarios financieros centrales como plataformas de intercambio o bancos para ofrecer instrumentos financieros ¿Dónde entra el compliance en esto? Te lo contamos en este posteo.